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La protección de las personas con discapacidad en España está garantizada por la Constitución, que establece el derecho a la igualdad y a no ser discriminado por motivos de discapacidad. El artículo 49 reconoce la necesidad de proteger y promover la plena integración de las personas con discapacidad en la sociedad, estableciendo el deber del Estado de asegurar su bienestar y garantizar su participación activa en la vida pública, social y laboral. Esta base legal no solo es un imperativo moral, sino que también se refleja en la legislación laboral y en políticas específicas que fomentan la inclusión en el ámbito laboral. Contratar a personas con discapacidad no solo es un acto de justicia social, sino que también aporta múltiples beneficios a las empresas.
1. Diversidad y Perspectivas Innovadoras
La diversidad en el lugar de trabajo promueve una variedad de perspectivas y enfoques para resolver problemas. Las personas con discapacidad a menudo enfrentan desafíos únicos que les permiten desarrollar habilidades creativas y resiliencia. Esta diversidad de pensamiento puede traducirse en soluciones innovadoras que benefician a toda la organización.
2. Mejora del Clima Laboral
La inclusión de personas con discapacidad contribuye a un ambiente de trabajo más solidario y respetuoso. Al fomentar una cultura de aceptación, las empresas pueden mejorar la moral y la satisfacción de todos los empleados. Un ambiente inclusivo no solo atrae a talentos diversos, sino que también retiene a los empleados existentes.
3. Aumento de la Productividad
Los estudios han demostrado que los trabajadores con discapacidad son tan productivos como sus colegas sin discapacidad. Además, muchas adaptaciones razonables, como horarios flexibles o herramientas tecnológicas, pueden mejorar la eficiencia no solo de los empleados con discapacidad, sino de todo el equipo. La inversión en accesibilidad suele resultar en un retorno positivo.
4. Acceso a Nuevos Mercados
Contratar personas con discapacidad también puede abrir nuevas oportunidades de mercado. Este grupo representa una porción significativa de la población, y entender sus necesidades puede ayudar a las empresas a desarrollar productos y servicios más inclusivos. Al hacerlo, las empresas pueden expandir su base de clientes y mejorar su imagen de marca.
5. Fortalecimiento de la Responsabilidad Social Corporativa
La contratación de personas con discapacidad mejora la imagen de la empresa y demuestra un compromiso genuino con la responsabilidad social. Las empresas que promueven la inclusión son valoradas positivamente por los consumidores, lo que puede influir en las decisiones de compra.
6. Desarrollo de Habilidades Blandas en el Equipo
Trabajar en un entorno diverso fomenta habilidades blandas entre todos los empleados, como la empatía, la comunicación efectiva y la adaptabilidad. Estas habilidades son cruciales para el éxito organizacional y contribuyen a formar equipos más cohesivos y efectivos.
7. Lo más importante: es un acto de justicia
Las personas con discapacidad tienen la potestad para realizar la mayoría de las tareas con la misma efectividad que las demás personas. Ni siquiera podemos hablar de una barrera clara entre la capacidad y la discapacidad: las personas nos movemos en un espectro, y la barrera del 33% para diferenciar a las personas con discapacidad es un imperativo legal para establecer cuotas de justicia social, pero no refleja de manera fiel la realidad. Lo fundamental es, a la hora de emprender la contratación, tomar en consideración exclusivamente las capacidades del perfil que serán relevantes para la tarea, fomentando una cultura de inclusión, independientemente de las demás características de cada candidato. Es evidente que una persona con discapacidad visual no podrá ser un buen conductor de camiones, pero nada evita que el mejor candidato a profesor sea una persona con discapacidad visual, gracias a las herramientas de accesibilidad de que disponemos hoy en día.
Beneficios fiscales de contratar a personas con discapacidad
Aunque la contratación de personas con discapacidad es un acto de justicia cuyos beneficios para el equipo, la empresa, y la sociedad ya hemos descrito, la legislación en España incluye una serie de ventajas fiscales para los empleadores que incluyan a personas con discapacidad en sus equipos como forma de paliar la discriminación sistémica y transversal que sufren estas en su día a día a la hora de acceder al mercado laboral.
La Ley 43/2006 del 29 de diciembre, para la mejora del crecimiento y del empleo prevé estos supuestos, y el Real Decreto Ley 1/2023 , de 10 de enero, de medidas urgentes en materia de incentivos a la contratación laboral y mejora de la protección social de las personas artistas, aumenta algunas ventajas e incluye una batería de beneficios para la promoción de la contratación de personas con discapacidad en medio del entorno de incertidumbre económica generado tras la pandemia de la COVID-19.
Contrato Indefinido para personas con discapacidad
Bonificación anual en caso de discapacidad:- Menores de 45 años: hombres, 4.500 euros; mujeres, 5.350 euros.
- Mayores de 45 años: hombres y mujeres, 5.700 euros.
Bonificación anual en caso de discapacidad severa:
- Menores de 45 años: hombres, 5.100 euros; mujeres, 5.950 euros.
- Mayores de 45 años: hombres y mujeres, 6.300 euros.
Personas con capacidad intelectual límite
Bonificación de 128 euros al mes
Contrato Temporal de Fomento del Empleo para personas con discapacidad
Bonificación anual en caso de discapacidad:- Menores de 45 años: hombres, 3.500 euros; mujeres: 4.100 euros.
- Mayores de 45 años: hombres, 4.100 euros; mujeres: 4.700 euros.
Bonificación anual en caso de discapacidad severa:
- Menores de 45 años: hombres, 4.100 euros; mujeres, 4.700 euros.
- Mayores de 45 años: hombres: 4.700 euros; mujeres. 5.300 euros.
Contratos Formativos con personas con discapacidad
Bonificación del 50 % de la cuota empresarial por contingencias comunes.
Contratos de sustitución de persona trabajadora con desempleados con discapacidad para sustituir a trabajadores con discapacidad en situación de incapacidad temporal
Bonificación del 100% de las cuotas empresariales por todos los conceptos.
Algunos datos sobre el empleo de las personas con discapacidad en España
De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística del año 2022, en España hay 1.941.900 personas con discapacidad en edad laboral: un 6.3% de la población en edad laboral total. Esto supone que, de cada 20 personas en edad de trabajar en España, una tiene discapacidad.
Existe aún un importante prejuicio que previene a las empresas de apostar por la contratación de personas con discapacidad. Lo más destacable de las estadísticas sobre el empleo de las personas con discapacidad es su baja participación del mercado de trabajo: solo un 35.3% de estas es personal activo: 42.7 puntos menos que la población sin discapacidad.
Además, el porcentaje de aquellas personas con discapacidad activas que se encuentran en régimen legal de desempleo es 8 puntos superior al de la población sin discapacidad en el mismo régimen legal: un 21.4% frente a un 12.8%.
En lo que respecta a las mujeres con discapacidad, sufren una doble discriminación transversal, por su condición de mujer, y por la de personas con discapacidad. Sin embargo, los más recientes datos del INE arrojan resultados esperanzadores: aunque la tasa de paro de las mujeres sin discapacidad es de 3.7 puntos superior a la de los hombres sin discapacidad; en el caso del colectivo con discapacidad, la misma relación se reduce hasta solamente 1.5 puntos de diferencia. Si miramos los datos sobre porcentajes de población activa por sexo, también vemos cómo existe una mayor diferencia entre hombres y mujeres sin discapacidad que entre aquellos y aquellas con discapacidad.
Lo que estos datos nos indican es que, aunque aún queda mucho camino por recorrer, las medidas de discriminación positiva encaminadas a la inclusión laboral de las mujeres discapacitadas parecen estar teniendo éxito, si tomamos como referencia los datos sobre población activa sin discapacidad como el paradigma donde nos movemos.
Si miramos a la tipología de la discapacidad, y nos fijamos en las personas con discapacidad visual, vemos cómo la tasa de actividad de las personas con discapacidad visual se ha reducido: es decir, que las personas con discapacidad están alejándose del mercado laboral. Categorías en las que sí ha aumentado la tasa de actividad son las de personas con discapacidad auditiva, e intelectual.