- La mitad de los niños y niñas de segundo y sexto de primaria con miopía no tienen correcciones ópticas.
- Entre segundo y sexto de primaria, el número de menores con miopía se triplica.
- Los niños y niñas que usan el móvil o la tablet justo antes de dormir tienen más posibilidades de desarrollar miopía.
La Asociación de miopía magna con retinopatías (AMIRES) ha presentado en Madrid el pasado 22 de febrero los resultados del mayor estudio de prevalencia de la miopía realizado nunca en España. La presentación ha tenido lugar en la sede de la Fundación ONCE, en Madrid, y ha contado con la presencia de más de 80 especialistas y miembros de entidades del campo de la salud visual y representantes de las consejerías de educación y de sanidad de la Comunidad de Madrid.
Con este estudio, AMIRES busca la mayor rigurosidad en el tratamiento de los datos para lograr las mejores cotas de calidad, y, para ello, se ha tomado una muestra de 2.489 niños y niñas de 2º y 6º de primaria. Esta muestra tiene en consideración parámetros de edad, sexo y socioeconomía. Los resultados del estudio se encuentran ponderados y se ha alcanzado un intervalo de confianza de hasta el 95% gracias a técnicas como las de bootstrapping.
El estudio ha desvelado que, entre los cursos de 2º y 6º de primaria, las niñas y niños que presentan miopía se triplican, alcanzando al final de la etapa escolar una prevalencia del 18.7%. De acuerdo con Gonzalo Carracedo, doctor en óptica y optometría, estos son datos muy altos, especialmente cuando tenemos en cuenta los porcentajes que presentan los niños y niñas de 2º de primaria.
La mitad de los niños y niñas con miopía de 2º y 6º de primaria en Madrid no tiene gafas
Un dato muy problemático desvelado por el estudio es el hecho de que los niños y niñas con miopía que no tienen correcciones ópticas a lo largo de los dos cursos estudiados se sitúa en la mitad. Esto es especialmente relevante si tenemos en cuenta que estos menores se encuentran en una fase fundamental de su desarrollo. Algunos estudios afirman que hasta el 80% de la información que percibimos nos entra por los ojos. De esta forma, parece una conclusión lógica asociar una baja visión a un rendimiento académico probablemente inferior. De acuerdo con David Piñero, investigador en la Universidad de Alicante, se hace evidente ante estas cifras la imposición de revisiones oftalmológicas en niños y adolescentes en los centros educativos. Según Carracedo, el menor problema que un niño o niña no revisado puede tener es la miopía: cuando no se realizan las revisiones pertinentes, se corre el riesgo de no detectar problemas mayores o patologías graves.
Los hábitos de vida y el desarrollo de la miopía
El estudio de prevalencia analiza también los hábitos referidos en los niños y niñas estudiados. No existe una diferencia muy importante entre los niños con y sin miopía en cuanto a sus hábitos a lo largo del día, pero las diferencias sí son más destacadas cuando se analizan los hábitos en el uso de pantallas electrónicas antes del sueño. Sergio Recalde, doctor en bioquímica, apunta también a que estas prácticas alteran deficitariamente el ciclo circadiano del menor.
Piñero indica al respecto del uso de dispositivos electrónicos que son herramientas fundamentales que no debemos demonizar, pero que sí debemos formar sobre su uso responsable para controlar la miopía. De acuerdo con Sara Llorente, doctora en medicina y cirugía, debemos controlar el uso de dispositivos de visión cercana en el colegio, ya que este supone casi la mitad de la jornada del menor. Priorizar el uso de pantallas alejadas y de proyectores sobre el de tabletas y de móviles son formas correctas de empezar a enfrentar el problema. Recalde propone que las aulas cuenten con vanos mayores para aumentar la cantidad de luz solar y que algunas de las clases sean realizadas al aire libre, puesto que en otros estudios se ha identificado una correlación entre las horas de luz solar y miopías menores.
La importancia de seguir investigando
Además de estas formas de prevención, también existen técnicas para limitar el crecimiento de la miopía en aquellos menores que ya presentan la sintomatología, como son las lentes de contacto específicas. Laura Batres, doctora en óptica y optometría, destaca que estos tratamientos son útiles y efectivos pero que solo lo son en la etapa de crecimiento de la miopía. Por ello, es fundamental que el menor sea revisado a tiempo y que los padres conozcan las opciones de tratamiento mientras la miopía es de una magnitud baja. Para ello, por supuesto, es fundamental la divulgación y la identificación del problema. Llorente propone que los estudiantes en las aulas vayan rotando entre las filas traseras y las frontales como forma de evidenciar los problemas visuales que puedan presentarse.
El estudio ha mostrado que, aunque los hábitos tienen una influencia importante en el desarrollo de la miopía, no podemos dejar de ver que la genética tiene un papel innegable. Los niños y niñas estudiados cuyos progenitores presentan miopía tienen una prevalencia de la condición casi tres veces superior a aquellos niños cuyos progenitores no tienen miopía.
Miguel de la Fuente, director de Demométrica, plantea que las conclusiones del estudio indican la necesidad de efectuar estudios similares a nivel nacional, de forma que podamos verificar otras variantes que no han podido ser analizadas con la muestra trabajada. Variantes como la influencia de la luz solar sobre la miopía pueden ser tenidas en cuenta en un estudio que tome una cobertura nacional y que estudie muestras del norte y del sur de España.
El estudio ha sido presentado por Fco. Javier García de Silva, presidente de AMIRES, junto con Gonzalo Carracedo Rodríguez, doctor en óptica y optometría; Laura Batres Valderas, doctora en óptica y optometría; David Pablo Piñero Llorens, doctor en óptica y optometría; Sergio Recalde Maestre, doctor en bioquímica; Sara Llorente González, doctora en medicina y cirugía; Natalia Márquez Ivacevich, vocal de la Sociedad Española de Retina y Vítreo; y Miguel de la Fuente Sánchez, director de Demométrica. También han ocupado un lugar en la mesa José Ignacio Martín Blasco, director general de educación infantil, primaria y especial de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid; e Imelda Fernández Rodríguez, vicepresidenta de servicios sociales y participación de la ONCE.
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Y recuerda que el 22 de febrero de 2023 presentaremos en Madrid los resultados del estudio de prevalencia la miopía. Puedes inscribirte para asistir de forma presencial o virtual, seas prensa, especialista, o particular.
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